Ternura de Navidad
Autor Letra y Música
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• Un niño berrea
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TONO MEDIO: MI
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Tiempo Litúrgico - Navidad
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Tiempo Litúrgico - Navidad
MI
Un niño berrea en la noche oscura,
LA SI7 MI
la historia madura se ha partido en dos,
LA SI7 MI
y un buey y un burrito retienen su aliento
LA SI7 MI
frente al Dios con hambre que recién nació
LA MI MI7
Una madre Virgen ofrece su pecho,
LA MI MI7
ofrece su leche al verbo de Dios,
LA LAm MI
y acuna en sus brazos el misterio inmenso
SI7 MI
al Dios que en su seno rostro le tejió.
Rosado entre pajas sonríe el Niñito,
regalo de carne que Dios nos dejó,
y un buey y un burrito contemplan absortos
al Dios que se duerme después que mamó.
Y una madre Virgen lo vela en sus sueños,
aparta las pajas que puedan pinchar:
"Conserva tu sangre, ser de mis entrañas,
hay tiempos y tiempos, mejor no pensar.?
El puente de carne dormita en pañales,
amor hecho abrazo entre el hombre y Dios;
la estrella cansada concluye su viaje
con guiños de luces al verlo al Señor.
Reyes y pastores tomadas las manos,
bailan una ronda con María y José.
No hay ricos ni pobres juntito al pesebre,
todos son hermanos del Dios de Belén.
Un niño berrea en la noche oscura,
LA SI7 MI
la historia madura se ha partido en dos,
LA SI7 MI
y un buey y un burrito retienen su aliento
LA SI7 MI
frente al Dios con hambre que recién nació
LA MI MI7
Una madre Virgen ofrece su pecho,
LA MI MI7
ofrece su leche al verbo de Dios,
LA LAm MI
y acuna en sus brazos el misterio inmenso
SI7 MI
al Dios que en su seno rostro le tejió.
Rosado entre pajas sonríe el Niñito,
regalo de carne que Dios nos dejó,
y un buey y un burrito contemplan absortos
al Dios que se duerme después que mamó.
Y una madre Virgen lo vela en sus sueños,
aparta las pajas que puedan pinchar:
"Conserva tu sangre, ser de mis entrañas,
hay tiempos y tiempos, mejor no pensar.?
El puente de carne dormita en pañales,
amor hecho abrazo entre el hombre y Dios;
la estrella cansada concluye su viaje
con guiños de luces al verlo al Señor.
Reyes y pastores tomadas las manos,
bailan una ronda con María y José.
No hay ricos ni pobres juntito al pesebre,
todos son hermanos del Dios de Belén.
